Aceite de Cazorla Variedad Arbequina

Este aceite se extrae de la variedad aceituna arbequina, originaria de Arbeca (Provincia de Lérida), de ahí su nombre, aunque en los últimos tiempos ha ido ganando protagonismo en Zonas de Andalucía y Castilla la Mancha. El olivo arbequina tiene una elevada productividad y un periodo de maduración medio; además, es muy resistente en diferentes suelos y condiciones climáticas frías, hecho que ha favorecido la expansión de su cultivo a otras zonas. Como ventajas hay que destacar que es un fruto que se desprende fácilmente del árbol, entra en producción con rapidez y es una de las variedades de aceituna con mayor porcentaje de rendimiento graso para la extracción de aceite.

La aceituna arbequina es de tamaño es pequeño, con forma esférica corta y de color verde amarillento. Puede ser utilizada como aceituna de mesa o para la producción de aceite. El resultado es un producto con un toque dulce y muy aromático, que recuerda a frutos secos como la almendra. Si la recolección es temprana presenta aromas frutados de plátano y manzana verde combinados con notas frescas de compota de fruta. Con la aceituna más tardía adquiere matices dulces que recuerdan a la vainilla y a frutas maduras. Muy suave en boca y sin apenas picor en el regusto, característico de otras variedades como la Picual.

No es un aceite tan estable y resistente frente a la oxidación como otras variedades, debido a que presenta una menor cantidad de polifenoles en su composición, y su tiempo de enrranciamiento es menor (como máximo un año). Por ello, debemos conservarlo resguardado de la luz y el calor para mantenerlo en óptimas condiciones y alargar su tiempo de consumo adecuado.

La sutileza de este aceite, nada amargo y sin picor, lo hace muy versátil a la hora de introducirlo en recetas, pues no ocultará el sabor de otros ingredientes o alimentos con los que se mezcla, aportando su aroma sin enmascarar otros. Es de las variedades más utilizadas en la cocina en repostería y a niños, y funciona especialmente bien en crudo para:

Aliñar ensaladas suaves y verduras, tanto cocidas como crudas.
Macerar mezclas de frutas y mermeladas.
Acompañar tostadas de pan y desayunos.
Montar mayonesas suaves y salsas delicadas.
Elaborar cremas ligeras o sopas frías.
Sazonar pescados blancos y mariscos.
Sustituir la mantequilla en recetas y masas de repostería, especialmente en bizcochos o magdalenas.
Fabricar helados salados y dulces con un toque de amargor.
Marinar anchoas, bonito o carnes.

Es apropiado también para tomar en crudo incluido en postres, por su aroma almendrado y dulce que aportará un toque especial.

El Aceite Sierra de Cazorla Arbequina, como otras variedades de aceite de oliva virgen extra, contiene un alto porcentaje de ácido oleico, que contribuye a reducir los niveles del colesterol llamado “malo” y a producir el “bueno”. Los polifenoles presentes en su composición actúan como antioxidantes naturales y protegen al organismo del envejecimiento prematuro y de los procesos degenerativos del cerebro, como el alzheimer, aunque existen variedades como la Picual, con una mayor concentración de estos elementos, que la hace más recomendada para personas con problemas cardiacos.

Por su suavidad, el Aceite Arbequina de Sierra de Cazorla, es el ideal para introducir a los niños en el consumo de aceite de oliva, ya que su sabor no es nada agresivo al paladar, y apenas deja sensación de picor. Por esta misma razón es una de las variedades más exportadas al extranjero, al ser de los más aceptados entre los consumidores no acostumbrados al sabor característico del aceite de oliva.
A pesar de todo sus beneficios, no debe abusarse del consumo de este aceite, pues aporta cantidades elevadas de calorías al organismo, por lo que aconsejamos su uso en cantidades moderadas.

En conclusión, podemos destacar que el Aceite Sierra Oliva Arbequina de la comarca de Cazorla es una variedad perfecta para aquellos que buscan un sabor delicado y sutil pero sin perder el carácter distintivo del “zumo” de aceituna que la hace especial.